Telam sin ética y con curiosos números oficiales

Télam, siempre haciendo el trabajo sucio para el oficialismo

LA CTA, YASKY Y LA FALTA DE ÉTICA PERIODÍSTICA

31 / 12 / 2010 Por Christian Sanz

Ayer, jueves 30 de diciembre, se hizo público un fallo donde la Justicia reconoció que Pablo Micheli debía estar al frente, al menos por ahora, de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA). Es que un juez laboral rechazó una medida cautelar que había presentado su rival, el oficialista Hugo Yasky, para que se desconociera su asunción.

Hay que recordar que este último siempre ha negado su cercanía al calor del oficialismo de turno, lo cual quedó refutado ayer mismo a través de la oficiosa —y vergonzosa— agencia Télam. Allí, en lugar de reflejarse la noticia principal referida al fallo en sí, solo se referenció la bronca de Yaski.

El portal de la estatal entidad, puso como título al artículo de marras, una polémica declaración del saliente titular de la CTA:“Micheli pretende generar actos en nombre de una CTA que sólo reconoce él”.

Prosigue la agencia: "En un comunicado, el dirigente explica que la resolución de no dictar una segunda medida cautelar acerca de la ilegalidad de los comicios complementarios, convocados por Micheli, se debe a que 'esto implicaría adelantar la sentencia acerca del amparo presentado por los representantes legales del Secretario General de la CTA Hugo Yasky'."

Finalmente, la nota destaca que "el Juez Pablo Candal confirmó la legitimidad de Yasky para representar a la CTA hasta la sentencia definitiva, ratificando de esta manera la prórroga de mandato dictada previamente por el Ministerio de Trabajo”.

Como puede verse, una verdadera hijaputez por parte de una agencia que pertenece al Estado y no al Gobierno de turno.

No es la primera vez que Télam hace algo así, ni será la última vez que lo haga. En contra de todos los manuales de estilo de periodismo, la agencia suele hacer réplicas a artículos que nunca publicó, haciendo que el lector se pierda en el contexto de una información que jamás se brindó de manera completa.

Sin embargo, la desvergüenza tiene explicación: el titular de Télam, Martín García, admitió hace unas semanas a diario La Nación queprefería llenar esa redacción estatal de militantes K antes que de periodistas profesionales.

Con esas declaraciones, García demostró desconocer una premisa fundamental en la prensa: la información no nos pertenece, sino a los lectores.

Télam, sus curiosos números oficiales y el periodismo alcahuete.

DE PAUTAS PUBLICITARIAS, GRITOS E HISTERIAS MÚLTIPLES

04 / 01 / 2011  Por Luis Gasulla

En la última semana del 2010, el destrato de no responder a la simple pregunta, por parte de las autoridades, de si continuaremos con nuestro programa en Radio Cooperativa, generó una sucesiva ola de llamadas a la agencia pública de noticias Télam. Allí se gestionan los pedidos de pautas publicitarias del gobierno nacional con sus respectivas campañas de “bien público” y se realiza el alta de los proveedores algo que había gestionado en agosto del pasado año. Cada mañana, mediodía y tarde, la increíble empleada, ante mi requisitoria, respondía lo mismo: “¿Podes llamar en otro momento?” Pero el 28 de diciembre, día de los santos inocentes, fue más allá: “Estamos brindando (mientras se escuchaba un jolgorio tinellesco de fondo) en esta época del año no se trabaja mucho acá”. ¿Pero descorchan los 365 días del año?, pensé.

El 30 cerramos el año radial observando a Víctor Hugo Morales como invitado estelar de otro programa de la emisora. Con su prestancia y su arrogancia característica, uno de los “incuestionables” del periodismo argentino —aunque hoy por hoy, nadie se salva del descrédito de gran parte de la sociedad argentina y echémosle la culpa al gobierno o no se la echemos y hagamos la autocrítica que el periodismo no está atravesando los mejores días—, se retiraba sonriente luego de hablar de lo que le encanta hablar: Clarín y el supuesto periodismo independiente. Alguien que también proclama esa bandera y que omite declarar públicamente los jugosos contratos que, en cada ocasión, que la Orquesta Sinfónica de los Medios Públicos lo citan para presentarlos en vivo o en la grabación de algún especial del primer canal de la historia de la televisión argentina.

El 2011 volví a la carga en Télam tras leer la imperdible nota del respetado Christian Sanz sobre una de “las islas de la fantasía” de un país como la Argentina y de releer una vez más el mensaje navideño de su presidente a los lectores comparando a Néstor con Jesucristo, ¿o era al revés? Como los Beatles, muchos kirchneristas creen fervientemente que son más grandes que los cuatro fabulosos de Liverpool quien, a su vez, se creía más popular que el hijo de Dios, único por cierto. En fin, Télam no debe ser un bello lugar para trabajar en enero. Al menos eso me hizo notar una de sus empleadas en un tono digno de Antonio Gasalla y su personaje típico de fines de los ochenta cuando en la sociedad se instalaba la idea de privatizar las empresas públicas, en especial, las telefónicas y se equiparaba al estado con la ineficacia.

Algunos números y en blanco…

Una de las eternas discusiones, es si corresponde que un periodista crítico (eso dicen de nosotros) tenga o goce de publicidad oficial. ¿Cambiaría con una pauta? ¿Corresponde? ¿Cuál es el parámetro y los requisitos para obtener una pauta? ¿Es un premio al periodismo como profesión entendida como búsqueda de una verdad, difusión de ideas y de información o premio al servilismo? Mientras sale a la luz los escandalosos cachets de los músicos populares con el gobierno nacional en el último recital por los derechos humanos (en alguna oportunidad habrá que indagar discursivamente sobre esa falacia) ¿De cuánta plata hablamos en relación con la publicidad oficial?

244 millones según la Jefatura de Gabinete de Ministros de la Nación se gastó el primer mes del 2010, desglosados de la siguiente manera: 23 millones invertidos en cableoperadores, 126 en medios gráficos, 33 millones en radio, 48 en televisión, 4 millones y medio en vía pública y en sitios web más blogs, los 7 millones dos cientos mil pesos restantes.

103.9 SRL recibe 20 mil pesos mensuales y es una radio llamada Fan de Quilmes y que también figura inscripta en los proveedores de la municipalidad de esa localidad. El teléfono de contacto es el 4257-1182. ¿Es la misma radio que en las elecciones del 2003, obtuvo también una publicidad con la Unión Cívica Radical del distrito de la provincia de Buenos Aires? ¡Vaya suerte!

Los proveedores son en total 722. El proveedor que más dinero recibe dinero, es “Editorial La Página S.A.” nombre comercial del diario Página 12 con 21.550.429,92 millones mensuales entre el formato en papel y la página web. Su registro de Marca es el 1590381.

Observar ese listado me genero diversos estados de ánimo. De la risa a la bronca y desemboqué en la impotencia. ¿Nuestro compañero de Radio Cooperativa, Gerardo Yomal, obtiene 12.500 pesos? Así no se puede competir. No hay anunciante que deje ni la décima parte de esa cifra. ¿Juan Pablo Baylac? El vocero de Fernando De la Rua durante sus últimos meses de gestión que le prometió a los vecinos de la Quinta de Olivos encontrarse y decirles “face to face” que sus ahorros volvían a residir en sus depósitos correspondientes, también goza de unos 12.100 pesos por su programa radial en una emisora de Parque Patricios. ¿Bernini Medios? ¿Será el mismo Bernini de Radio Nacional? Enrique Vázquez, el periodista que hasta el 2010 fue columnista del programa de Juan Alberto Badía en la Televisión Pública – Estudio Bicentenario- suma 9 mil pesos. Tuvo suerte el hombre, pues, estuvo en la cuerda floja cuando algunos periodistas más progres que él, cercanos al gobierno, le tiraron por la cabeza el expediente y algunas fotos en la revista Somos de la época de la última dictadura militar por algunos reportajes condescendientes con los uniformados. La Cornisa Producciones del ahora crítico Luis Majul, levanta 383 mil pesos en tres soportes distintos: radio, televisión y página web (más de 100 mil duplicando los ingresos radiofónicos). Jefatura de Gabinete, o sea, ellos mismos, casi 2 millones. Las firmas continúan… Hay para todos los gustos… (Continuará…)