Ex diplomático de EE.UU. asegura que la Argentina no pertenece al G-20.

La Argentina no se merece ser miembro del G20 y el presidente Barack Obama tiene razón en no pasar por Buenos Aires en su primera visita de Estado por América del Sur. Esa es la dura opinión de James Roberts, un ex diplomático estadounidense y miembro de The Heritage Foundation, un think-tank conservador de Estados Unidos.


El ránking anual de libertad económica de Foundation, compilado junto con The Wall Street Journal, ubica a la Argentina en un lamentable 138º puesto de un total de 179 países. Por lo tanto, uno de los mayores exportadores mundiales de materias primas y alimentos del mundo quedó ubicado entre Guinea y Vietnam y solo pocos puntos por encima de países como Etiopía, Burundi y Togo. Este índice se basa en una evaluación que abarca temas como libertad de comercio, libertad fiscal, gasto del gobierno, libertad cambiaria, libertad de inversión, derechos a la propiedad, corrupción y libertad de trabajo.
Para mejorar, la Argentina debe resolver la cuestión de su deuda en default, comentó Roberts. Las conversaciones con el Club de París son una buena noticia, pero “es necesario ver un progreso real y tangible”, algo que la Argentina espera que suceda en unas semanas. La falta de transparencia, las estadísticas oficiales distorsionadas y un Banco Central que no se muestra totalmente independiente son todos manchones adicionales en el cuaderno argentino que requieren solución, agregó.
“Los grandes países soberanos simplemente no se comportan de esa manera. La Argentina no pertenece al G20”, dijo durante un viaje a Buenos Aires. “Deben arreglar los libros para tener derecho al rol de liderazgo al que aspiran”.
“Aplaudo la decisión del presidente Obama (de no visitar la Argentina)”, aseguró y agregó que eso sólo refleja “el sentimiento internacional de que la Argentina no es un país serio”.
Roberts concluyó en un estudio a punto de publicarse sobre el panorama de la Argentina: “Para los intereses de Estados Unidos sería mejor que gane un gobierno conservador en las elecciones que se realizarán en la Argentina en 2011. El estado de derecho y los principios de libre mercado, que se vieron debilitados durante la era Kirchner, recuperarán la libertad económica. Una solución para la deuda soberana y una negociación de un acuerdo de libre comercio beneficiaría a ambos países”.
A Roberts le gustaría ver un cambio en el tono político en octubre. Pero, tal como dijo con nostalgia: “Es trágica la parálisis política en el campo de los conservadores, comparado con el continuo dominio de la máquina peronista.


fuente: http://www.dolaraldia.com/notas/10625/ex_diplomatico_de_ee.uu._asegura_que_la_argentina_no_pertenece_al_g_20.