Estan convencidos de que son los únicos capacitados para gobernar el país. Se engañan a si mismos y los adulones de turno que viven alrededor de ellos fomentan ese engaño. Y eso que Menem gobernó 10 años con amplio respaldo electoral. Y eso que los Kirchner ya van para 8 con perspectivas de que Cristina se quede 4 años más si gana en octubre y otros 4 si reforman la constitución para habilitar una nueva reelección, cosa que hoy está prohibida.
Por supuesto que disfrazan sus verdaderas intenciones y niegan que se trate de un mezquino sentimiento de mantenerse atornillados al poder eternamente. Lo hacen porque son generosos y como una ofrenda al pueblo dicen que son capaces de sacrificarse para profundizar el modelo que es la felicidad del pueblo y de la Nacion que los desvela.
¿De donde surgen estas versiones de que el cristinismo quiere gobernar hasta el 2019? Un par de miembros de la mesa chica dejaron trascender que de esa manera se fortalece a la presidenta por varios lados. Primero porque se da por descontada su victoria el proximo 23 de octubre. Algo asi como decir que Cristina ya ganó, que está todo dicho, que no hay con que darle. Y segundo porque si alguien se ilusionó con ser el heredero político del proyecto en el 2015 como Daniel Scioli, por ejemplo, deberá saber a partir de ahora, que el gobierno no se rendirá ante esa posibilidad.
Si Scioli quiere venir que venga, le presentaremos batalla. Eso parece decir el ala mas cristinista y menos peronista del gobierno. Estan convencidos que de esa manera evitan que el próximo gobierno de Cristina se queda sin poder a los dos años cuando se desate la lucha por la sucesión.
Es un viejo consejo de Néstor Kirchner en vida: no te presentes a una elección si no tenés reelección. Y finalmente para concretar estos proyectos de impulsar el cristinismo como etapa superior del kircherismo la idea es dejar el peronismo o el Partido Justicialista en un costado de la ruta. Hasta aquí fueron buenos compañeros que sirvieron para llegar al poder y para gobernar. La alta intención de votos de Cristina hace que sus asesores mas cercanos le digan que el Pejota ya no le sirve como estructura ni como aparato, que todo lo contrario, le quita votos y coloca sombras a la luz que produce el sol naciente de Cristina. Esa idea que tiene una impronta entrista y utilitaria bien setentista suena a musica maravillosa en los oídos de Cristina y la cantan Carlos Zannini, Juan Manuel Abal Medina y Horacio Verbitsky entre otros.
Esa idea lleva a una confrontación que va a ser para alquilar balcones desde el punto de vista de la teoría política. Porque en la práctica eso conduce a que mas temprano que tarde Cristina busque reducir a cero el poder de Daniel Scioli primero, que es el único posible rival con votos que aparece a la vista.
Después irán por los intendentes ortodoxos, los sucios, feos y malos que hasta hace poco eran compañeros útiles nacionales y populares. Y al final, la pelea será contra varios gobernadores y contra el sindicalismo que hoy lidera Hugo Moyano que por ahora es el principal aliado del gobierno para la pelea callejera y para el apriete a los empresarios.
Son muchas novedades para procesarlas en poco tiempo. Hay que seguir la evolución de cada una para sacar las mejores conclusiones. Por ahora Cristina llenó el escenario de preguntas fundacionales. ¿Intentará reformar la constitución contra viento y marea? ¿Cuándo dará la batalla final contra el justicialismo? ¿Scioli resistirá? En algunas de estas respuestas están las llaves del futuro que se viene. Hay que tener paciencia y los ojos bien abiertos.
fuente: http://www.continental.com.ar/blog.aspx?id=1432374
No hay comentarios:
Publicar un comentario