Soberanía alimentaria y el doble discurso gubernamental
La pesca es un tema que debe ser tratado como política de estado, no como la moneda de cambio al enriquecimiento de flotas extranjeras afincadas junto a desaprensivos armadores locales. Estos, desde el poder económico que les da la captura del pescado de todos los argentinos, compran la voluntad de los vendibles funcionarios de turno. Lo que ocurre en el sector es gravísimo y Clarín tampoco dice nada al igual que los poderosos medios, ocultando una verdad que es la destrucción de la soberanía alimentaria de la Patria.
La Argentina es un país sin destino pesquero sustentable en el cual los anuncios del Gobierno nada tienen que ver con la realidad. ¿Por qué el Gobierno sigue favoreciendo grupos extranjeros de pesca y en especial a buques surimeros altamente depredadores? El buque Centurión Del Atlántico de la empresa Extremar subsidiaria de American Seafood, fue nuevamente denunciado por depredación, arrojar pescado al agua, usar artes de pesca ilegales y no llevar inspector a bordo. Nada hace mella en quienes manejan el destino pesquero argentino porque cada día hacen más caja. Bajo el titulo “A veces una imagen vale más que mil palabras” la Revista Puerto describe acabadamente esta atrocidad sustentable. La Argentina es un país de mayoría “funcionarios Shoklender” blindados bajo el paraguas del Gobierno, se hacen millonarios velozmente con el dinero de todos los argentinos.
Surgen preguntas simples hacia el Ejecutivo sobre el porqué permitir la destrucción del caladero Argentino cuando el mundo protege la sustentabilidad. Somalia es un espejo de la Argentina donde operan flotas extranjeras subsidiadas, con empresas mixtas al igual que nosotros, que mantienen arreglos corruptos con el Gobierno tal como aquí. Mar del Plata y la Patagonia son símiles de la política pesquera de entrega africana. La falta de controles y fiscalización pesquera de la actual estructura de coimas continuas permite que buques como este Centurión Del Atlántico pesquen con redes ilegales que nadie fiscaliza, mientras vacían el Mar Argentino. La Shoklenderización aduna ir por más. En la Argentina la pesca ilegal es avalada por el Gobierno al omitir las auditorias de la UBA-AGN-PTN-SIGEN en referencia a permisos ilegales y las corruptelas del sector. Estas auditorías han sido sepultadas por este Gobierno formado por una banda con poderes omnímodos, aun sobre la Justicia SA. ¿Cómo opera un buque semejante sin inspector a bordo? Es algo que tampoco tiene respuesta. ¿Se labran actas de infracción? ¿Se lo suspende por 60 días por la gravedad publicada reiterada de sus ilegalidades? Tampoco.
Desde su página web miente descaradamente ante el mundo pues en la Argentina no respeta su compromiso con la gestión de la pesca responsable y eficaz. Ingresando al link anterior puede leerse: “Recursos pesqueros saludables y estables son base del éxito de nuestra empresa. Trabajando en asociación con los administradores de la pesca y otros miembros de la industria, promovemos y apoyamos medidas que fomenten la pesca sostenible en el largo plazo. Entendemos que el privilegio de pescar lleva consigo la obligación, como guardianes de un recurso público, de proteger y preservar el medio ambiente para las generaciones futuras”.
Es evidente que la empresa en su país donde realmente se la controla, respeta y cumple. El control de la sustentabilidad está muy lejos de ser realidad en la República Argentina, donde la putrefacción institucional todo lo avala. La SAGPyA y Consejo Federal Pesquero en pleno utilizan la Ley 24.922 Federal de Pesca que pone en sus manos el ingreso a la “caja”.
Artículo 1°: “La Nación Argentina fomentará el ejercicio de la pesca marítima en procura del máximo desarrollo compatible con el aprovechamiento racional de los recursos vivos marinos. Promoverá la protección efectiva de los intereses nacionales relacionados con la pesca y promocionará la sustentabilidad de la actividad pesquera, fomentando la conservación a largo plazo de los recursos, favoreciendo el desarrollo de procesos industriales ambientalmente apropiados que promuevan la obtención del máximo valor agregado y el mayor empleo de mano de obra argentina.”
Esta ley es de 1998 y pretendía proteger nuestro recurso pesquero. Lleva 13 años de violación. La situación del caladero sigue empeorando. Las mismas empresas, los mismos artilugios legales, los funcionarios de turno formados en años de corrupción y dispuestos a todo, la Justicia SA ciega de poder. Todos robando el futuro alimentario de generaciones de argentinos. Quienes han sido responsables de años de depredación anhelan llegar a ser jefes del ejecutivo para potenciar sus años de creación de pobreza. Mario Das Neves y Felipe Solá como gobernadores de grandes riquezas marítimas provocaron la pauperización de miles de trabajadores de la pesca. Quienes los convocan a sus filas preludian el futuro pesquero de la Nación.
Piratas de Somalia
Algunas de esas empresas están pescando radicadas en la Argentina tanto continental como en Islas Malvinas. En este link se puede ver un video del tema muy ilustrativo. Si luego se preguntan si aquí también arrojan al mar basuras toxicas, pesticidas, radioactivos y demás inmundicias, piensen en un país sin radarización ni control del litoral marítimo y elevadísima corrupción con funcionarios como Julio De Vido y Yahuar, o jueces como Norberto Oyarbide.
Recordemos que en la Argentina dejan abandonados en containers todo tipo de basuras, pagando para que nadie se entere. La Argentina tiene un tema similar en el sur con la pesca indiscriminada y la complicidad del Gobierno que tiene arreglos incluso con flotas locales y extranjeras. Hay que generar conciencia sobre este tema que debe ser tratado como una necesidad dentro de la política de Estado. Es necesario divulgarlo porque esto está oculto en la información de los medios corporativos.
Las mentiras de un gobierno corrupto y “shoklendarizado”
Desde el Gobierno, Cristina Fernández mantiene el mismo estilo de Néstor Kirchner enviando permanentemente mensajes de orden enarbolando leyes y resoluciones para que aceptemos su autoridad como la verdad, en vez de la verdad como autoridad. La SAGPyA publicó en el boletín oficial del 10-sep-2010 con número 31984 en la página 37, la Disposición 206/2010. Esta normativa que crea el Sistema Integrado de Control a través de cámaras de video y del registro de información en tiempo real a bordo de los buques que componen la flota pesquera. Al ver estas medidas ¿nos parecerá que la corrupción se terminará y la sobrepesca también? Imposible, siendo algunos de quienes la administran los que cajonearon y robaran la auditoria de la UBA. Nunca se llevaron a cabo las recomendaciones de esta auditoría. Deben pescar sólo los buques que tenga permisos legales, de lo contrario la pesca pasara a ser un recuerdo y el nuestro otro caladero muerto. Con esta resolución, la Subsecretaria de Pesca “puso” en marcha el monitoreo satelital de la flota, paso clave para la sustentabilidad. Lo impresionante es que este sistema fue reglamentado por la Resolución 367/98, también de SAGPYA. ¿Qué sucedió en estos 14 años que se vuelve a reeditar un sistema de monitoreo satelital?
La trampa para seguir robando radica que el ciudadano no puede ver online la posición de los buques, como tampoco podrá ver lo que muestran las cámaras que teóricamente filman las especies que suben a cada buque, las que arrojan cada buque por día y las medidas ilegales de las mallas de las redes. Esta resolución es para hacer más caja, pues el control lo tendrán los delincuentes que por años manejan la pesca argentina, los únicos responsables del colapso actual del caladero.
Durante décadas, la merluza fue uno de los recursos pesqueros más abundantes del mar argentino. Sin embargo, donde hace 20 años nadaban 10 merluzas adultas, hoy sólo quedan dos. Y, ante la desaparición de adultos, se están capturando peces chicos, juveniles, que aún no lograron cumplir su ciclo reproductivo, alterando todo el ciclo de esta especie y agravando la crisis que actualmente atraviesa el sector. Se ha afectado a miles de trabajadores y una decena de empresas en los últimos años. La merluza, el principal recurso pesquero de nuestro país, no sólo ha perdido más de un 80% de su población en los últimos 20 años sino que aún no se han tomado medidas que garanticen su sustentabilidad. La Fundación Vida Silvestre Argentina advierte respecto al riesgo en que se encuentra el principal recurso pesquero de nuestro país, que, reitero ha perdido el 80% de su población en los últimos 20 años. Los nombres de todos los subsecretarios de pesca de estos últimos 20 años debieran figurar en causas por incumplimiento de toda la normativa del sector y defraudación al patrimonio de todos los argentinos. ¿Esta megacausa caerá en Oyarbide? Una causa durmiendo la tiene el Dr. Rafecas.
Esto ratifica lo dicho, y reitero: los delincuentes que manejan el sector solo sacan del mar millones de dólares para llenar sus bolsillos, pagar campañas políticas sin importar la sustentabilidad de la biomasa y el caladero argentino. Mientras la gran mayoría de nuestros políticos estén preocupados por ellos mismos en vez del pueblo y el hambre genocida que generan, los seguiremos viendo y escuchando pululando por los medios sin nombrar ni por error la situación del caladero. Mientras la democracia sirva para poseer fueros y negociar años de impunidad, caso “vende patria Memen”, nuestra institucionalidad es frágil. La filosofía de estos políticos corruptos se encuentra grabada en el oro del anillo de Julio Grondona: “Todo Pasa”.
“Hay dos maneras de difundir la luz, ser la lámpara que la emite, o el espejo que la refleja". Lin Yutang
Roberto Maturana Oficial de marina mercante-Investigador
Fuentes: Tribuna y Roberto Maturana
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