domingo, 10 de abril de 2011

El gran momento de los Malos. Por Alejandro Borensztein


HUMOR POLÍTICO

En general, nos suele ir bastante bien. Pero sin duda, el Club de los Malos está atravesando uno de sus mejores momentos . Sentimos el viento en la camiseta.
Reflexionábamos sobre esto, mientras recorríamos los quirófanos del Hospital Piñero para verificar la exitosa culminación del operativo “Que te cuide Cadorna” . En este caso, se lograron tres objetivos al mismo tiempo: exponer en Capital la perversión del kirchnerismo, demostrar que el macrismo no puede resolver el más mínimo problema y, lo más importante: hacer sentir al pobre corderito de Dios que las autoridades nacionales y las de su ciudad no tienen la menor consideración por él , y que está irremediablemente atrapado sin salida. Triple carambola.
Por su parte, los encarajinadores K siguen cosechando éxitos , como la maniobra de lanzamiento del partido de D’Elía, con este simpático personaje parado al lado del ministro Tomada mientras ambos observaban por pantalla gigante el saludo de la Presidenta, algo que no tendría nada de malo si no fuera porque todo estaba engalanado con la presencia del representante de Irán . Una operación simple pero devastadora, que coronó una catarata de impericias provocadas por el CDLM para que el gobierno se autodestruya, incluyendo el llamado al paro de Moyano, el bloqueo de diarios, la alianza con Saadi y Menem, la persecución a las consultoras económicas y el premio a la libertad de prensa otorgado a Chávez , entre otros logros.
¿Qué sentido tendría este esfuerzo si al mismo tiempo no hubiéramos devastado a todos los frentes opositores con un ataque masivo? Por ejemplo, el PJ Federal arrancó muy bien con la maratón de internas entre Duhalde y Rodríguez Saá, con un exitoso papelón juntando sólo 30.000 votantes sobre un padrón de millones. Lo curioso es que no hizo falta la intervención del CDLM para impedir que la gente se acerque a votar. Simplemente no fueron.
La topadora que arrasa con este grupo ya venía de destrozar a Das Neves con la maniobra que armamos en las elecciones de Chubut, presentándolo frente a la sociedad como un tipo que pretende ser presidente y no puede organizar ni siquiera un comicio provincial . Aplastados estos tres personajes, la flota de encarajinadores del PJ Federal puso rumbo hacia Felipe Solá. Veremos.
Por otra parte, cayó muy mal en el CDLM que los encarajinadores del PRO le hayan hecho decir a Macri: “Estamos en el peor momento de la democracia” . Si bien esta expresión sirvió para seguir masacrando al ingeniero, constituyó una ofensa para el Club, que ha tenido logros mucho más importantes como el inolvidable fin de año del 2001 o los levantamientos carapintadas. De todas formas, esta frase, sumada a sus expresiones xenófobas durante la ocupación del Indoamericano, nos acerca a la demolición definitiva del macrismo.
Al radicalismo le volvimos a pegar en el casco del barco , convenciendo al senador Sanz que debía bajarse de la interna de abril, de cuya convocatoria él mismo había participado semanas atrás. Hace años que en la UCR todo nos resulta fácil.
En las tierras de Pino y Lilita hay un equipo del CDLM apostado de manera permanente, con la instrucción de mantener estas fuerzas totalmente intransigentes y lejos de cualquier acuerdo con partidos grandes. La consigna es mantener encendida la vocación de partiditos bichicomes.
Reconforta contemplar este magistral pandemonio político, estacando en los corazones de la sociedad la convicción de que seguirán teniendo esta vida miserable que ellos creen que les ha tocado en suerte, pero que no es otra cosa que lo que el Club de los Malos ha planificado cuidadosamente a través de los años .
Pero también estas victorias nos permiten mitigar algún dolor, como el que nos provocó la implosión de Cobos. Una lástima, realmente. Un cuadro del CDLM que supo dañar por igual tanto al oficialismo como a la oposición y que, sin duda, vamos a extrañar.
Por suerte, esto no enturbió la sencilla ceremonia de inauguración de la estatua del canciller Timerman . Una escultura en bronce, donde se lo ve desnudo como el David de Miguel Ángel, sólo que en lugar de la honda y la piedra porta una hoja de papel y una réplica del bolígrafo que usó para controlar personalmente, cual vista de aduana, los pertrechos del avión militar norteamericano . La imagen es un poco desagradable porque obviamente no tiene la misma figura que el modelo florentino, pero es un merecido homenaje a uno de los momentos más desopilantes en el camino hacia la destrucción del kirchnerismo . Para quienes quieran visitarla, está en el jardín del pabellón neuropsiquiátrico del Hospital del CDLM.
De esto hablaba un grupo de padres en la casa de Luisana Lopilato (el día de su casamiento), mientras nuestros pequeños turritos hacían un entrenamiento de saqueo en el living y los dormitorios. Una velada simpática con tragos y música de Michael Bublé, para esta pequeña operación de perturbación social. Por supuesto, el objetivo no es robar, ya que todo lo obtenido se dona a FUNGUACA (Fundación para el Guachito Carenciado). Simplemente se busca que la noticia se difunda para sembrar angustia y, al mismo tiempo, demostrar que no hacemos excepciones y que el CDLM, tarde o temprano, golpea tu puerta.
Ya se acerca la Semana Santa y hay mucho por hacer. Mientras los tiernos corderitos de Dios preparan sus escapadas turísticas, nosotros ya tenemos todo listo para las habituales huelgas de micros , los paros de aviones y maleteros y los simpáticos disturbios en los aeropuertos, incluyendo las madres con los chicos en brazos llorando, los turistas extranjeros varados, gente durmiendo en las salas de embarque y el intento de linchamiento del personal terrestre . En fin, el mismo zafarrancho de cada año, a lo que se le suma la tradicional estampida mortalen el precio de la merluza . Linda coincidencia: tanto los corderitos de Dios, como los miembros del CDLM, tenemos en el calendario las fechas de Semana Santa marcadas en rojo.
El viento de cola hace milagros. Pero cuando las ráfagas de la bonanza menguan, cuando el soplido del aire atenúa y cuando las dificultades vuelven, se desploman los proclamadores de falsas victorias . Es cuando emergen, impertérritos, los verdaderos triunfadores. Eternamente incólumes, permanecerán los ganadores de siempre. Nosotros, los Malos.

fuente. Clarín

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