Por fuerte estado febril, reemplazo esta página de humor político por una breve reseña de la semana.
Domingo Siguen las repercusiones por la conferencia de CFK en Harvard. La falange oficialista denuncia que los estudiantes fueron manipulados por los medios hegemónicos para que formulen preguntas jodidas y los descalifican como si el problema hubieran sido las preguntas de los pibes, en lugar de las respuestas de la Presidenta. Esa noche, the big conspirator Lanata muestra los detalles del viaje y explota el rating. Algo no anda bien: habiendo tantos programas que te cuentan lo lindo que es el Gobierno, el público elige mayoritariamente ver “Fuck you para Todos”. Mal presagio para la semana.
Lunes El Gobierno quiere encerrar en el baño a un miembro del Consejo de la Magistratura (Recondo) para ganar la votación y nombrar a una jueza que es empleada del Gobierno , en el juzgado que trata el temita de la ley de medios. Esta aconsejó recusar al tipo para sacarlo del medio (ya sabemos que una jueza que da consejos más que una jueza es una amiga). La maniobra oficial fracasa y todos los que se opusieron a la designación de esta jueza pasan a llamarse “esbirros empleados de los medios diabólicos” (si hubieran votado a favor de la mina, serían llamados “paladines de la justicia independiente”, como Oyarbide).
Martes Gendarmes y prefectos salen a la calle en protesta por un decreto que les rebaja el sueldo. Reclamo justo, método incorrecto. Al toque, en la Rosada se avivan que para poder tomar los canales el 7D, además de un par de admiradores de López Rega, necesitan a las tropas de la Gendarmería . Los gendarmes contestan: por 3.000 pesos por mes, decile a tu hermana que vaya a tomar Cablevisión . El Gobierno da marcha atrás, raja a las cúpulas y culpa a los medios malos de promover la movida y transmitir la protesta. Las organizaciones que conforman el núcleo duro K denuncian que todo está organizado por los grupos mediáticos destituyentes que nunca descansan. Es evidente que alguno de sus agentes, como Sábat, Eliaschev, Magdalena y Fernando Bravo , ni bien volvieron de Harvard, dejaron sus disfraces de estudiantes y le hicieron firmar el famoso decreto a la ministra Garré, al jefe de Gabinete y, ya que estaban, a la mismísima Presidenta de la Nación. Pero al rato un nuevo episodio descoloca al gobierno: el noticiero de Telefe se suma a la maniobra apátrida y transmite la protesta de los gendarmes con 3 móviles en simultáneo. La conducta golpista de los medios ya es contagiosa.
Miércoles Los gendarmes siguen en la calle. La Presidenta evita usar el helicóptero porque el helipuerto está demasiado cerca de los insurgentes. Vuelve a Olivos en auto y comenta: “¡Qué linda que es la ciudad de Buenos Aires! Hace una década que no la veo” .
Esa noche, un grupo comando perteneciente al brazo armado del diario Olé provoca un cortocircuito en el estadio donde iban a jugar Argentina y Brasil. Los medios satirizan al gobernador Capitanich que estaba allí, no por ningún interés político o de propaganda personal, sino porque pasaba, vio luz y subió (bueno, vio luz un ratito ). Los tentáculos mediáticos llegan hasta Brasil, donde los diarios locales se burlan de la Presidenta por el apagón. La conjura se expande internacionalmente. Crece el imperialismo Suar.
Jueves En un claro acto de sabotaje organizado conjuntamente por un comando de Perfil y otro de Radio Continental (con apoyo logístico de la revista Playboy), el kirchnerismo se complica solo anunciando la destitución del Auditor General de la Nación, el radical Leandro Despouy, cargo que de acuerdo con la Constitución pertenece a la primera minoría opositora, o sea la UCR. Increíblemente, intentan rajar al tipo que, desde la AGN, hizo los informes sobre el negociado ferroviario, subsidios, mafias, Jaime, Schiavi & Cía , justo el mismo día que secuestran al testigo que debía ir esa misma tarde a Tribunales para deschavar la joda de los trenes. Una maniobra mediática perfecta. La oposición en pleno se reúne para respaldar a Despouy pero no tienen mejor idea que denunciar que esto es un “atentado a la democracia” y “un golpe de estado institucional”. Mamita. Que esto fue una de esas truchadas que hace el Gobierno, ya lo sabemos todos, pero de ahí a decir que es un intento de golpe, me parece que se fueron al carajo . O sea, se fueron al mismo lugar al que se iría el Gobierno, un par de horas después, cuando volvió a tratar de encerrar en la baulera al miembro del Consejo de la Magistratura que quieren volar para ganar la votación y enchufar un juez bonito.
A esa altura, los medios ya no daban abasto . Había cámaras en Prefectura, en Gendarmería, en el Consejo de la Magistratura, en el Chaco (con declaraciones exclusivas del electricista oligarca) y, para colmo, cámaras siguiendo las novedades sobre el secuestro del testigo en el tema ferroviario, seguramente para agitar la sensación de miedo e inseguridad. Pero lo peor aún no había llegado. A las 17.05 hora local se detienen las rotativas en todo el país: el hijo del gordo Porcel pide que vuelvan los militares . Bingo. La conjura mediática ya es innegable.
Viernes El ministro de Justicia, Julio Alak, declara que el secuestro de Severo está vinculado con la aplicación de la ley de medios ( al cierre de esta nota, el señor ministro aún no había sido trasladado al Borda ).
Al atardecer, Macri veta la ley de aborto no punible que había aprobado la Legislatura y desaprovecha la oportunidad de pasar al frente y dejar en offside al kirchnerismo que tiene prohibido hablar del tema en el Congreso. Desconcierto. ¿Qué canal, diario o revista está detrás de esto? ¿Caras? ¿El Gráfico? ¿Volver?
Sábado Afiebrado, desisto de revisar los diarios. Mando la nota directamente. Vaya uno a saber qué nueva conjura me habré perdido. Eso sí, Dios quiera que hoy domingo gane Chávez porque si llega a ganar Capriles, no hace falta explicar por culpa de quien habrá sido.
Algunos hablan de peligros y miedos. Ojalá se equivoquen. Por suerte, Marx dijo que la historia se repite, primero como tragedia y luego como comedia. Debe ser así, porque esta semana la realidad me ahorró el laburo . Igual les voy a cobrar la nota, malditos medios.
fuente: Clarin
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